Tras la lectura en clase de la obra de Agatha Christie, La ratonera, que guarda ciertas similitudes con la novela negra que tan en auge está en los últimos tiempos, ha llegado el momento de convertirse en el sagaz detective o policía responsable de una investigación policial.
En la vida real, los expertos en criminología recurren a las pizarras policiales para resolver un crimen. Este método consiste en plasmar en un tablero cuál es el misterio que se ha de resolver, quiénes son los principales sospechosos, cuáles son sus motivaciones, quién (o quiénes) es la víctima, qué pistas o razones sirven para inculpar a los sospechosos, en qué lugar se cometió el crimen, qué testimonios se han recogido durante la investigación, etc.
¿Qué pasos has de seguir?
- Antes de crear vuestra pizarra policial, deberás reflejar por escrito algunos datos que te ayuden a organizar la información:
- Quiénes son las víctimas.
- Un listado de sospechosos.
- Qué pistas te hacen sospechar para situarlos en tu punto de mira.
- Información adicional: lugares del crimen, posibles declaraciones de los testigos o implicados...
2. Distribuir en un corcho o en una cartulina (que representa la pizarra policial) todas las anotaciones que habéis hecho previamente en el esquema anterior. Estructura tu pizarra de manera clara y legible, incluye imágenes de las víctimas y sospechosos, emplea hilo de colores y chinchetas para establecer las relaciones entre los personajes, recrea las pistas, añade escritos con las pruebas que se vayan encontrando... Como siempre, se valorará la creatividad y la originalidad.
3. Prepara un informe que os facilite la presentación oral (unos cinco minutos) del contenido de la pizarra policial, es decir, habéis de explicar detalladamente la construcción de vuestra pizarra. Para ello se tendrá en cuenta la siguiente RÚBRICA.
Os dejo también esta presentación de mi compañera María Climent para que os ayude en todo el proceso. Presentación resumen de la tarea
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